Hace un buen tiempo, escribí esto, por si las dudas, por si algún día llegaba a sentir algo fuera de mi egocentrismo y acritud. Es cursi y denota a leguas mi torpeza en cuanto a escritura se refiere. Bueno, jamás me he jactado de escribir "bonito" ni mucho menos. En fin, estaba yo con lo de mi escrito. Es largo, hasta un poco confuso incluso para mí, y no dice nada relevante que no haya sido plasmado ya por otros escritores más talentosos que yo, pero en aquella época estaba casi harta de no sentir nada, nada. Digo, tampoco ahora, pero al menos, un poco de ese tibio sentimiento que se le conoce como amor empieza a tomarme en cuenta...en fin, ya se darán cuenta de hasta qué punto.
Ayer en la noche mis hermanos Alex, Mateo y yo estabamos alimentándonos sanamente con mi vicio de los fruti lupis. Entonces nos preguntábamos si es que alguna vez habían existido los fruti lupis o si todo era producto de un delirio colectivo del pueblo mexicano. "El otro día pensaba en esto tambien" -comentaba Alex- "y supongo que debe haber una prueba de que habían existido, algo asi como que hubiera una caja, por ahí, que dijera así: Fruti Lupis". Al principio yo había dudado de mi memoria, seguro que todo era porque así escuchaba que decían los adultos cuando era chica. Digo, todavía no sabía leer (y mucho menos en inglés) cuando empecé a comer cereales coloridos y ultra azucarados. La cosa es que cuando Alex mencionó la palabra "caja" de repente un foquito se me prendio, ¿ quien decia que no habia ninguna pinche caja de Fruti Lupis?. Sí....en algún momento, tal vez, sólo tal vez, existió una caja que decía Fruti Lupis. Pensemos bien. Todavía te cre
Comentarios