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Ayer

Hace un buen tiempo, escribí esto, por si las dudas, por si algún día llegaba a sentir algo fuera de mi egocentrismo y acritud. Es cursi y denota a leguas mi torpeza en cuanto a escritura se refiere. Bueno, jamás me he jactado de escribir "bonito" ni mucho menos. En fin, estaba yo con lo de mi escrito. Es largo, hasta un poco confuso incluso para mí, y no dice nada relevante que no haya sido plasmado ya por otros escritores más talentosos que yo, pero en aquella época estaba casi harta de no sentir nada, nada. Digo, tampoco ahora, pero al menos, un poco de ese tibio sentimiento que se le conoce como amor empieza a tomarme en cuenta...en fin, ya se darán cuenta de hasta qué punto.

La pluma que se suponía debía llevar un nombre escrito se manchó de tinta y mis pocas fuerzas de sobresalir se fueron muy lejos. No cabe duda que que cada quién es artesano de su propia vida, su destino. Y también es un trabajo muy mal pagado, aunque se dice por ahí que si compartes con alguien ese peso, todo parece aligerarse y aparece un sentimiento que los poetas y viajeros forasteros que se dicen con mayor experiencia llaman Amor. Si bien soy joven, inexperta, e incluso muy ingenua aún, sé que el Amor no es algo que nazca de la noche a la mañana ni por cualquier persona. Puede ser que ame a mi familia, aunque yo no lo sepa, o que ame a mis escasas amistades, aunque tampoco tenga idea de lo que significa. Pero no conforme con esto, me gustaría experimentar, aunque sea por una vez, el Amor que a todos parece interesarles(...)que está antes que el honor, antes que la lucha, antes de sí mismo y la amistad incluso. Reitero que mi juventud esta, por ahora, encima de todos mis actos, plasmada, como un tatuaje, todos los errores que voy cometiendo. ¿Y es que ser joven implica también ser estúpido? todos los de mi generación lo creen así. Y sin embargo, a pesar de no tener un ideal definido sencillamente me resulta imposible que me guste siquiera una persona. Todos tienen manías y defectos, como cualquier gente. Y virtudes, como todos. El error radica en que todos son como todos, nadie es único. Necesito a alguien que sea capaz de amar la vida, que no le importe lo que piensen de él, que sea aventurero, que no le importe si hoy llueve o no, que disfrute de no hacer nada, donde e sexo no sea lo esencial, donde cualquier conversación signifique algo. Pero intento no idealizar y ponerme de exigente, aunque cada persona que llega a mi lado resulta ser mas imbécil que el que se fue anteriormente, lo cual no me molesta dada mi casi nula capacidad de relacionarme correctamente con la gente de mi edad y comprender al cien su sistema(...). Osea, sencillamente tengo que esperar. No tengo prisa, pero a veces...no sé si se defina como soledad. O algún otro sentimiento extraño que es como el aroma de la lluvia. A veces gusta, pero también hace llorar...


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